Siempre hemos sabido que Estados Unidos ha sido un país muy violento, ¿pero que país no lo ha sido en la historia? Los más fuertes devoran a los más débiles, no hay otra salida.
En la política global de Donald Trump se advierte, sin ningún tipo de disimulo, la beligerancia de sus acciones y actos contra otras naciones menos fuertes (que son todas las demás, a excepción del Reino Unido, su gran aliado). Gracias al Brexit británico, Trump comienza a bombardear a la Unión Europea, para que ceda a sus exigencias económicas. Es el momento de debilitar a Europa y crear grietas más profundas en su economía. Sin embargo, Europa podría actuar con energía, y asentar sus lazos con Latinoamérica.
Estamos envueltos en una guerra económica salvaje y despiadada. Pensar que Trump es nuestro aliado, es creer la mentira más repugnante que se vende en muchos medios. El presidente americano se vanagloria de su poder ante todas las demás naciones, no dejando títere con cabeza. Hay que recordar que posee el armamento nuclear más avanzado del planeta, y si llegara el momento, no dudaría en usarlo.
Estados Unidos es el único país que ha usado la bomba atómica contra civiles indefensos en Hiroshima y Nagasaki. Fue un genocidio, donde la acusación de crímenes de guerra todavía se mantiene tácitamente en silencio.
Somos europeos, pero eso no significa que Trump es nuestro amigo. Primero está su país, luego, los demás. Así ha sido siempre y parece que siempre lo será. Ocurrió con el Imperio Romano, con el Imperio Español, con el Imperio Británico y el Francés.....,y ahora, con el Imperio Estadounidense.
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